Echa un vistazo y sorpréndete con los coches que cumplen 30 años en 2020, uno de los requisitos para que se puedan matricular como históricos…
A punto de comenzar el nuevo año, ¿qué mejor momento que éste para echar un vistazo a los automóviles que van a cumplir los 30 años en 2020? Porque ya se sabe que ésta es la edad con la que los vamos a poder matricular como históricos. Siempre, claro está, que estén conservados y mantenidos en condiciones históricamente correctas y que no sean utilizados como medio de transporte diario.
Aunque hay que decir que a partir de ahora cada vez nos vamos a encontrar con vehículos históricos que tienen un nivel de comodidad, seguridad y sofisticación que poco tienen que ver con un coche clásico en el sentido “clásico” (valga la redundancia) de la palabra y habrá que ver cómo se incorpora esto a nuestra afición.
En fin, vamos a ello. Con alguno seguro que tú… sí, tú… te quedarás sorprendido (“¿tanto tiempo ha pasado?”)… aunque a lo mejor por otro lado tú… sí, tú… aún no habías nacido…
Lamborghini Diablo
Siguiendo la tradición de Lamborghini, una vez más el nombre vino del mundo de los toros. Diablo fue el nombre de un toro especialmente feroz que dio mucho trabajo a “El Chicorro” en Madrid el 11 de julio de 1869. Y con su V12 de 5,7 litros, este bólido también plantó cara a más de un piloto. Porque hablamos de un deportivo de los de antes: había que ser muy mañoso para sacarle todo el partido. Y es que sólo en apariencia ya intimidaba, con sus formas básicas diseñadas por Marcello Gandini y luego redondeadas por orden de los directivos de Chrysler. Las últimas de las 2.884 unidades fabricadas hasta 2001 ya fueron refinadas por los ingenieros de Audi/Volkswagen.
Volkswagen Golf Country
Hoy en día pueblan nuestras carreteras pero a principios de los noventa los “crossover” ni siquiera se llamaban así. De hecho, nadie sabía cómo clasificar este vehículo, un poco grotesco con su altura, sus defensas delanteras y la rueda de repuesto a la vista. Al menos, la tracción a las cuatro ruedas le daba algo de credibilidad a todos esos adornos, aunque los 98 CV resultaban bastante justos y a los 155 km/h se acababa la fiesta. Pero hoy en día el Country va ganando encanto y su precio ya supera los 10.000 euros en buen estado, a lo que contribuye que sólo se hicieran 7.735 unidades.
Volkswagen T4
La cuarta generación del Volkswagen Transporter rompía con la tradición que había empezado su bisabuelo en exactamente cuarenta años antes. De repente decíamos adios al concepto “todo atrás” tan propio de Volkswagen y que tanto carisma había dado a sus antecesores, hoy en día deseados clásicos ya los tres. Pero la tracción y motor delanteros daban a la nueva furgoneta una enooorme versatilidad, aumentada si cabe por las dos longitudes disponibles. Hasta 2003 se estuvo fabricando en Alemania, Polonia, Indonesia, Taiwan y Malasia.
Volvo 940/960
Para muchos, este sería el último Volvo auténtico, con su tracción trasera, sus formas geométricas y un interior sin florituras pero tremendamente confortable. En realidad, se trataba de una revisión de los 740 y 760 que los precedieron, y en el caso del familiar 745 la evolución era incluso más difícil de adivinar a simple vista. Y para confundir más a los no expertos, durante su vida Volvo cambió su sistema de nomenclatura de sus modelos, de manera que este se convirtió con algunos retoques en el S90 (berlina) y V90 (familiar), aunque el 940 se siguió denominando así hasta el final – todo muy sencillo… Se fabricaron unas 670.000 unidades con ambas denominaciones hasta 1998.
Renault Clio
Con este nombre inspirado en la musa griega de la historia, Renault comenzaba a poner nombres propios a sus modelos en lugar de números. Tras algunas excepciones como el Floride/Caravelle y el Fuego, el 19 fue el último Renault que llevaba un número como designación y desde 1996 todos los modelos de la Regie tienen nombres. Tomando la mecánica de los R9 y R11, los acabados y la calidad general del Clio eran no obstante bastante mejores, lo que junto al confort y un diseño atractivo contribuyó a que fuera un éxito de ventas: nada menos que cuatro millones de ejemplares se fabricaron hasta 1999.
Mercedes-Benz 190 E 2.5-16 Evolution II
El Mercedes-Benz W201, también llamado 190 y cariñosamente “Baby-Benz” venía fabricándose ni más ni menos que desde 1982. Pero en esa época aún los modelos eran de largo recorrido y ocho años después los de Stuttgart lanzaban esta maravilla con un nombre tan largo que casi no me cabe el título en una línea. En perspectiva, sus 235 CV suenan a más bien poco, pero conducir este bólido era y es una experiencia sublime, a decir de los periodistas que lo probaron en la época. Lo que sin duda contribuyó a la leyenda de este modelo que con 502 unidades fabricadas, hoy en día se cotiza en torno a los 200.000 euros.
Mercedes-Benz 500 E
Sin duda, este fue un año interesante para los fans de Mercedes porque unos meses después del Evo II llegaba al mercado esta bomba. Es un símil muy manido pero es que aquí tenemos al epítome del lobo con piel de cordero, ya que externamente sólo los guardabarros ligeramente ensanchados y la denominación del modelo delatan lo que hay dentro de lo que era básicamente la mitad de los taxis de Alemania. Sí, en éste los directivos de la marca de la estrella habían decidido implantar un V8 de cinco litros y 326 CV. Y además (estas cosas ya no se hacen…) el proceso de fabricación debió resultar una locura a los contables de la compañía…
Porsche recibía los coches sin motor, modificaba la suspensión y otras partes mecánicas a mano y luego los enviaba a Mercedes para pintarlos, para volver a otra fábrica de Porsche donde recibían el motor. Finalmente los coches terminados volvían a Mercedes para la inspección final y la entrega. Porsche estaba en la época en una profunda crisis y este encargo (orquestado por políticos alemanes) ayudó a la empresa a salir a flote. Fue la época de los cambios de denominación y éste modelo con fue una excepción, pasando a llamarse E 500 durante su producción, que fue de 10.479 unidades hasta 1995.
Mitsubishi 3000 GT
A principios de los noventa Japón dio al mundo automovilístico algunos de sus mayores iconos y en este año llegaron dos deportivos de pura raza. Eso sí, la mayoría iban cargados de soluciones electrónicas, como en el caso de éste Mitsubishi, denominado en algunos mercados también GTO, que contaba con cuatro ruedas motrices y direccionales, suspensión electrónica, ABS y alerones delantero y trasero activos. Gracias a un acuerdo con Chrysler, en EEUU se vendió como Dodge Stealth, un ejemplo de “badge engineering” que puedes encontrar junto a muchos otros en éste otro artículo. Se hicieron 86.151 Mitsubishi 3000 GT y 65.303 Dodge Stealth hasta el año 2000.
Nissan 300 ZX
El otro deportivo japonés nos vino por cortesía de Nissan, también con cuatro ruedas direccionales pero con un carácter muy propio. Para empezar estaba el motor, un V6 con doble turbo y unos fenomenales (para la época) 283 CV. Y luego estaba una especialidad de Nissan/Datsun para el mercado americano: el techo desmontable con forma de “T”. Se hicieron 164.170 unidades hasta el año 2000.
Chevrolet Corvette ZR-1
Esta bala proveniente de Detroit fue bautizada enseguida por la prensa como “King of the hill” – el rey de la montaña. También aquí encontramos electrónica por todas partes, incluyendo amortiguadores regulables desde el interior. Pero eso no quita nada de la épica de este modelo, diseñado para ponerse a la altura de la competencia europea, cosa que para muchos consiguió. Ante todo gracias a su motor V8 en aluminio, pero también por sus prestaciones (alcanzaba los 290 km/h) y su apariencia… la parte trasera era nada menos que once centímetros más ancha que el modelo normal, para alojar unos neumáticos descomunales con medidas 315/35 ZR 17. Se hicieron 6.939 unidades hasta 1995.
Alfa Romeo Spider Tipo 4
El Spider es uno de los coches más longevos de la historia y fue gracias a esta cuarta evolución que el modelo se pudo meter en los años noventa, con una inyección electrónica moderna y los paragolpes en plástico en el color de la carrocería. Y por fin desaparecía el alerón trasero de goma negra que había ofendido durante años a los puristas. Pero por desgracia para muchos, no duró mucho y tras sólo tres años y 21.407 unidades dijimos adiós a esta leyenda.
Otros modelos que cumplen 30 años en 2020
Me dejo este párrafo para hablar de otros modelos que se lanzaron hace treinta años pero que probablemente tardarán aún mucho tiempo en ser considerados clásicos. Porque no parece que muchos vayan a girar la cabeza en reuniones de clásicos cuando pase por delante un BMW de la serie E36 (2.745.773 unidades fabricadas hasta el año 2000) o la cuarta generación del Audi 100, que a su media vida pasó a llamarse A6 y se fabricó hasta 1997. En ese mismo año dejó de fabricarse la quinta generación del Ford Escort y un año antes cesó la producción del Nissan Primera P10, otra berlina cuyo encanto aún buscamos en vano.
DH